Con el pasar de los años, la lectura ha dejado de ser parte primordial de la vida de las personas. Esto se evidencia especialmente en los niños, los cuales han dejado atrás esta sana y divertida práctica.
Seguramente como padres se harán estas preguntas ¿es realmente importante que mi hijo/a lea? ¿Acaso leer le ayudará en sus estudios? La respuesta a ambas interrogantes es ¡Si!
Ante todo es necesario que conozcas los beneficios de la lectura en los niños, dentro de los cuales encontramos:
- Aumenta su capacidad analítica: con la lectura los niños pueden llegar a entender diversas situaciones cotidianas y la manera adecuada de resolver las dificultades que se presentan en su entorno sea este el hogar, la escuela, la casa de familiares y/o amiguitos y lugares donde asisten a recrearse como parques, piscinas, entre otros.
- Desarrollar empatía y aprender a expresarse emocionalmente: es sabido que en la niñez se presentan los conocidos berrinches y en el acoso escolar se ha vuelto cada vez una problemática más presente en las escuelas; a través de la lectura el niño/a se vincula emocionalmente con los personajes a través de las similitudes y diferencias entre ellos, y aprende que a expresar sus necesidades y miedos. Esto permite que tenga mayor confianza al expresar mediante palabras, lo que vive en su entorno a diario en vez de guardárselo y/o expresarlo a través de gritos o con agresividad para con los de su núcleo familiar o que agreda a algún compañero de clase debido a emociones mal manejadas; además hay que tener en cuenta que la empatía ayuda a tratar de la mejor manera a las personas de nuestro entorno.
- Comprensión lectora y mejora de la escritura: a los niños, leer les ayuda a conocer una gran cantidad de palabras y las situaciones donde pueden utilizarlas. Esto permite el enriquecimiento de su lenguaje, permitiendo una mayor capacidad de expresión al momento de hablar o escribir lo que hará un impacto significativo en la manera de realizar y exponer sus trabajos escolares afectando de manera positiva sus notas académicas.
- Imaginación y capacidad creativa: mediante la lectura, los niños pueden viajar a lugares irreales con criaturas fantásticas mediante el uso de la imaginación. Esto les ayuda a expandir su forma de ver el mundo y todo lo que los rodea. Al tener esa capacidad, es más fácil que un niño/a sea capaz de plantearse más de una sola opción al momento de realizar alguna actividad sea esta de carácter académico o cotidiano. Esto se conoce como ‘’pensar fuera de la caja’’.
- Vinculación emocional: cuando la lectura se lleva a cabo entre padres e hijos se lleva a establecer un vínculo entre el niño/a que lee y el padre que escucha o viceversa, debido al tiempo compartido y la cercanía. Además esto ayuda a que los padres conozcan los intereses de los hijos y que el niño/a sienta se sienta seguro para hablar con sus padres de sus sueños o metas a corto, mediano y largo plazo o de cualquier situación que le genere incomodidad. Esto último es muy importante debido a que sólo en un ambiente de confianza los niños son capaces de contar ciertas experiencias que nos indicarán si está o puede llegar a ser víctima de acoso escolar, maltrato o violencia sexual. Y que tú como padre o madre puedas tomar acciones para garantizar su seguridad.
Es importante que como padres fomenten la lectura en los niños; para así ayudar a su desarrollo emocional, psicológico y educativo. La mejor manera es disponer un momento del día para hacerlo y que leas con ellos, ya que no hay forma más efectiva de incentivar que con tu ejemplo.
También debes ofrecerles a tus hijos libros acorde a su edad y que contengas elementos o situaciones que sean del interés del niño/a. Por ejemplo si es un niño que está comenzando a aprender a leer y gusta de los animales, puedes darle un libro con muchas ilustraciones y frases cortas que cuente la historia de algún niño y su mascota. Si el niño ya maneja la lectura escoge un libro con menos cantidad de imágenes y más contenido escrito pero con palabras que el pueda entender de acuerdo a su edad. Si ya posee 10 años o más, proporciónale un libro que trate sobre algún interés que tenga sea algún animal, algún deporte que le guste, etc; pero recuérdale que ante cualquier duda o palabra que desconozca puede recurrir a ti para preguntarte.
Anímate a implementar la lectura en la vida de tus hijos y haz que disfruten de sus beneficios.